El próximo lunes 31 de marzo vence el congelamiento de las dietas de los senadores nacionales. Si no se adoptan nuevas medidas, los legisladores pasarán a percibir un salario bruto de 9,5 millones de pesos. La vicepresidenta Victoria Villarruel anunció que planteará este tema en la próxima reunión de la Labor Parlamentaria. Esta reunión precederá a una sesión clave donde se debatirá la posible aprobación de Manuel García-Mansilla y Ariel Lijo como miembros de la Corte Suprema.
Congelamiento anterior y situación actual
En agosto de 2024, tras una polémica por el aumento de sus haberes, los senadores decidieron congelar sus dietas hasta el 31 de diciembre de ese año. Posteriormente, el 2 de enero de 2025, la vicepresidenta Villarruel extendió este congelamiento hasta el 31 de marzo. Sin una nueva prórroga, las dietas se actualizarán automáticamente, duplicando el salario actual de los senadores y superando ampliamente el de los diputados nacionales.
La discusión sobre las dietas coincide con el debate en el Senado sobre los nombramientos de Manuel García-Mansilla y Ariel Lijo para la Corte Suprema. El presidente Javier Milei designó a ambos por decreto durante el receso legislativo, una medida que generó controversia y cuestionamientos sobre su constitucionalidad. García-Mansilla ya ha asumido el cargo, mientras que la designación de Lijo enfrenta impugnaciones y aún no ha sido confirmada por el Senado.