
El pasado fin de semana, en el boliche Sentiloo Pool Bar de Villa Allende, un joven de 22 años, Tomás Bravo, fue brutalmente agredido por un grupo de hombres no identificados, quedando inconsciente. El incidente ocurrió en la calle Leandro N. Alem, donde se ubica el establecimiento.
Falta de ayuda y denuncia judicial
Los empleados del boliche no prestaron auxilio al joven. Una mujer con conocimientos de enfermería se convirtió en la principal socorrista al atenderlo de inmediato. En declaraciones emitidas por Canal 10, Tomás Bravo relató: “No sé quiénes son, tampoco sé por qué empezó todo. Yo estaba tranquilo con mi novia y, cuando me doy cuenta, me despierto en un hospital con mi viejo al lado”. El joven permanece en tratamiento y bajo vigilancia médica.
Los abogados que representan a la víctima, del estudio Crucella & Asociados, realizaron una presentación en Tribunales. Su objetivo es identificar al grupo de agresores y extender la responsabilidad a los dueños del local. El estudio jurídico hizo un llamado a la comunidad para que se presenten testigos y colaboren con la investigación. Las declaraciones y pruebas recogidas serán fundamentales para esclarecer los hechos y establecer responsabilidades.
Las autoridades locales están solicitando la colaboración de testigos que puedan aportar información sobre la agresión. Hasta el momento, no se han identificado a los responsables. La familia de Bravo pide a quienes presenciaron el hecho que se presenten ante las autoridades para brindar su testimonio.