
La expresidenta de Brasil, Dilma Rousseff, de 77 años, fue ingresada el pasado viernes 21 de febrero en el Shanghai East International Medical Center, en Shanghái, tras presentar síntomas de hipertensión arterial, vómitos y mareos. Según su equipo de comunicación, Rousseff responde positivamente al tratamiento y espera su alta en los próximos días.
Afección diagnosticada: neuritis vestibular
La condición médica que presenta Rousseff fue identificada como neuritis vestibular, una inflamación del nervio vestibular, que controla el equilibrio. La afección, generalmente causada por infecciones virales, provoca vértigo intenso, náuseas y pérdida de equilibrio.
La exmandataria presentó episodios de vértigo severo, lo que llevó a su ingreso hospitalario. Asimismo, los médicos confirmaron que está respondiendo positivamente al tratamiento. La exjefa de Estado, que había sufrido de hipertensión previamente, está recibiendo atención para estabilizar su presión arterial.
A pesar de su hospitalización, Rousseff continúa trabajando en sus tareas diarias de manera remota. Se suspendió su participación en una importante reunión del consejo del NBD, que estaba programada en Ciudad del Cabo, Sudáfrica, debido a su estado de salud.
Nuevo Banco de Desarrollo
El NBD, con sede en Shanghái, es la institución financiera creada por los países BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) en 2014, durante la presidencia de Rousseff. El banco tiene como objetivo financiar proyectos de infraestructura y desarrollo sostenible en economías emergentes, y fue diseñado para reducir la dependencia de las instituciones financieras tradicionales como el Banco Mundial y el FMI.
Se espera que Rousseff reciba el alta médica en los próximos días y retome sus responsabilidades al frente del banco, donde desempeña un papel clave en la expansión de la institución.